lunes, 14 de septiembre de 2009

Confianza


Tienen la bendición del Señor Dios y la mía todos mis hermanos custodios que reciban este escrito, lo copien y lo guarden consigo, y hagan sacar copias para los hermanos que tienen el oficio de la predicación y el de la custodia de los hermanos, y prediquen hasta el fin todas las cosas que se contienen en este escrito. Y todo esto, por verdadera y santa obediencia. Amén.

S. Francisco, Carta a los custodios